Portada y reportaje en el periódico El Negocio
La fatalidad de no poder dedicarse
a la afición preferida
por falta de tiempo tiene remedio
en algunos casos. Aunque
al hablar de simuladores
se piense en videojuegos y
pantallitas, hay algunos sistemas
que reproducen casi al
detalle deportes tan de aire libre
como el golf o el automovilismo.
De hecho, algunos
profesionales los utilizan para
perfeccionar movimientos o
practicar cuando no pueden
acudir a los entrenamientos.
Ya no hay excusa. Si Mahoma
no va a la montaña...
Los simuladores de golf
quizás sean los sistemas que
mejor reproducen la sensación
de estar sobre el césped
de un campo. Habitualmente
tienen muchos complementos,
pero los elementos esenciales
son una pantalla gigante,
un proyector y alfombras
de hierba artificial. La equipación,
los palos y las bolas son
las habituales para jugar al
golf. El jugador pincha un tee
especial en la alfombra sobre
el que coloca la bola de golf.
A continuación selecciona el
palo con el que quiera practicar
y golpea la bola en dirección
a la pantalla, en la que se
proyecta un campo virtual. La
pantalla está fabricada con un
material resistente para soportar
los impactos, e incorpora
unos sensores que analizan la
fuerza del golpe y la trayectoria
de la bola. Automáticamente,
un programa informático
reproduce en la pantalla
la dirección de la bola y cómo
avanza hacia el hoyo en juego.
Cada simulador tiene un
software específico. Uno de
los que se distribuye en España,
el Golf GPS Simulator de
la empresa española Ever
Golf, permite jugar en una
treintena de campos de golf
de todo el mundo (Valderrama,
Belfry, Bay Hill), introducir
el hándicap y la tarjeta
del jugador, añadir diferentes
opciones de viento y lluvia,
seleccionar la visión del entorno
y participar en torneos
y concursos. Según Juan
Francisco García Estrada,
profesor de la Escuela de
Golf Indoor Campoamor de
Madrid que utiliza ese sistema
para enseñar a sus alumnos,
“con el simulador no solo
se puede aprender a golpear
la bola sino que también se
puede aprender a jugar al
golf. Tengo alumnos profesionales
e incluso alguno ha
llegado a ser campeón de España
de las categorías inferiores”.
El modelo básico del
GPS Simulator cuesta alrededor
de 7.000 euros (con todos
los complementos supera los
17.000 euros), por eso quizás
sea buena idea probarlo antes
en alguna escuela, donde se
puede alquilar el simulador
para jugar un partido por 20
euros.
